QUINCHIA RISARALDA


 HISTORIA
Quinchía, también conocido como La Villa de los Cerros, en un municipio colombiano situado en el departamento de Risaralda, sobre la Cordillera Occidental de Colombia. Con una historia salpicada por la violencia colombiana, es sin embargo un pueblo con mucha riqueza cultural y natural, a la vez que es caracterizado por la amabilidad de su gente. En 1985 fue calificado como El pueblo más lindo de Risaralda, por la gobernación de ese departamento.
La región que hoy ocupa el municipio de Quinchía era habitada por distintos grupos indígenas de la etnia Caribe. Esta región era llamada "Guacuma" por los indígenas, estaba habitada por las tribus de los Guaqueramaes y los Tapascos de la familia de los Ansermas y los Irras con idiomas y costumbres diferentes. Sebastián de Belalcázar fue el primer europeo que cruzó el territorio Guacuma. Luego llegaron Juan de Badillo y Jorge Robledo quien llegó al poblado Tapasco de Chiricha, donde cercos de guadua coronados de cráneos humanos y el lúgubre sonido que producía el viento al pasar por ellos les causó una honda impresión, dando origen a la vez al nuevo nombre de la región Quinchía, el poblado de las fortalezas de guadua llamados “Quinchos”.



Los Tapascos cultivaban la tierra por el sistema de terrazas, y a la par eran excelentes alfareros. Los Irras explotaban el oro de aluvión y al igual que los indios Guaqueramaes extraían la sal de las fuentes salinas de la región. El comercio lo practicaban en los mercados o "Tiánguez" en donde cambiaban la sal y el oro por alimentos y armas. Estos indígenas cultivaban principalmente maíz, yuca, fríjoles, ají, patatas, ahuyamas, algodón y tabaco. Sus herramientas eran fabricadas de piedra y macana. Algunos estudios, realizados por historiadores, demostraron que estas naciones, conocían y practicaban con suficiente conocimiento, la aleación de oro y cobre.

En 1572 los frailes franciscanos fundaron el convento Anserma, bajo su tutela quedó la doctrina de San Nicolás de Quinchía, para hacer frente a los ataques de las tribus del Chocó, a cuyo alrededor estuvo el caserío que hoy es conocido como "Quinchíaviejo". En tiempos de la independencia el caserío de Quinchía dependía del distrito parroquial de Anserma , que pertenecía éste a la vez a la providencia de Popayán. El departamento del Cauca llegaba en esa época hasta los poblados de Quinchía y Riosucio, limitando directamente con Antioquia.


Fotografía del caserío Quinchíaviejo.En el año de 1870 el entonces Estado del Cauca se divide en Municipios. Entre ellos el municipio del Toro, que comprende los distritos de Riosucio, Toro, Ansermanuevo, San Juan de Marmato y Quinchía. Así, Anserma se convierte temporalmente en corregimiento de Quinchía al igual que Nazareth (Guática) y Arrayanal (Mistrató). Ya para 1892, la Asamblea del Cauca por ordenanza 33 de Agosto 17 de 1892, erige a Anserma nuevamente como Distrito.

Entre tanto, principios de 1882, se decidió comenzar a buscar un sitio más propicio para la cabecera urbana del municipio. Era de urgencia suma trasladar el antiguo rancherío, a un lugar con mejor flujo de agua y cerca del Camino Real, que entonces llevaba al convento de Anserma. Los pobladores (en su mayoría indígenas), no lograban ponerse de acuerdo: unos proponían irse a la vereda de Naranjal y otros para el llano de la quebrada Barrigona, situado al lado del Cerro Gobia. Sin poder resolver sus diferencias los pobladores dejaron la decisión en manos de la Virgen Inmaculada. Así pues, tras largos e infructuosos viajes recorriendo trochas y atajos, uno de los cargueros resbaló y la Virgen se fue de bruces contra el rastrojo. Ése fue el punto escogido donde los quinchieños iniciaron la construcción de la iglesia y empezaron a levantar sus ranchos sin apoyo ni autorización del gobierno caucano. En 1884 el antioqueño Protasio Gómez, que por ese entonces residía en Riosucio, continuó los trabajos del templo a cambio del arrendamiento de una mina de carbón.